LUNES, 18 JULIO 2011
Domingo 16 de Julio de 2011 (Diario La Tercera)
La visión de Roberto de Andraca, presidente de CAP, es una: los estragos del terremoto de febrero de 2010 ya quedaron atrás y ahora se está reactivando la construcción en las zonas afectadas. Tal factor junto con la recuperación de la economía son los que impulsan con fuerza la demanda por acero.
El empresario estima que dadas las buenas condiciones de la actividad minera y del sector de construcción e infraestructura, el país podría crecer 7,1% en 2011, lo que supera las expectativa de los economistas. "Está muy fuerte el país, impulsado por la reconstrucción de la zona sur, de Huachipato, Talcahuano y Concepción más la minería", señaló.
Debido a este mejor escenario, el grupo está reactivando los análisis del millonario plan de expansión de la siderúrgica Huachipato. El programa pretendía invertir US$ 2.420 millones para elevar de 1,4 millón a 3 millones de toneladas la producción de acero líquido. Este proyecto fue cancelado a fines de 2008, por la crisis mundial y el impacto que tuvo en el mercado del acero.
De Andraca, señaló que actualmente, la realidad de esta industria es distinta que la vivida hace un par de años. "Estamos en un período de revisión de las inversiones. No estamos pesimistas (con el escenario de la industria)", afirmó De Andraca.
Agrega que el camino que tomarán las inversiones en la acerera recién lo definirán en diciembre próximo. Hoy están en un período de "fuertes análisis técnicos", pero enfatizó que CAP no tiene "apuro" en tomar una decisión.
Una opción para Huachipato, destacó, es la expansión "pura y simple" en manos de CAP. La otra es hacer el desarrollo con un socio o concretar la ampliación con asistencia tecnológica de terceros, pero sin participación en la propiedad. "Esos son, más o menos, los caminos generales que puede tener Huachipato", dijo el empresario.
Los planes del grupo van más allá. Indicó que a través del holding Invercap, estudian el potencial de crecimiento que tienen algunas inversiones en centrales minihidro que impulsan en la zona sur.
"Estamos pensando si conviene crecer firmemente ahí o no. Es una decisión que tomaremos junto con la de Huachipato, porque ese es el gran consumidor de energía", señaló. En esta materia, históricamente la compañía se ha abastecido de energía a través de contratos de largo plazo con las eléctricas. Por lo tanto, un desarrollo energético propio implica un cambio en su estrategia.
Hoy los contratos de energía que tiene CAP, pasan a nueva etapa de precios, lo que permitirá rebajar la tarifa. Sin embargo, el empresario es enfático en su diagnóstico. "Los costos de la energía están dañando a la industria chilena".
Agrega que están esperando las decisiones que vaya a tomar el Estado sobre obras importantes como HidroAysén.
"No sabemos cómo está reaccionando el Estado, por eso estamos esperando lo que está haciendo. Hasta ahora, el Estado ya paró una central, nosotros hemos parado otra en la misma área de HidroAysén".
Su diagnóstico es que todo lo relacionado con la energía tiene un trámite "muy lento" y estima que por eso, el gobierno tiene que ser firme en las decisiones que tome, "publicarlas y forzarlas".
Fuente: La Tercera
